Carlo Acutis: El primer santo milénial del mundo. Descubre la historia de este adolescente italiano que conquistó internet para Dios y fue reconocido por su devoción y habilidad tecnológica. Su canonización marca un hito para la Iglesia y puede atraer a los jóvenes católicos de vuelta a la fe.
El papa Francisco ha dado un paso decisivo en el camino hacia la canonización del adolescente italiano Carlo Acutis, al atribuirle un segundo milagro, anunció el Vaticano. Este acontecimiento sitúa a Acutis como el primer santo milénial de la Iglesia Católica, destacando no solo por su devoción religiosa, sino también por su habilidad para utilizar la tecnología con fines espirituales.
Carlo Acutis, conocido entre los católicos como el "santo patrón de internet", nació en Londres en 1991 y se trasladó a Milán con su familia siendo niño. Desde muy joven, Carlo mostró una profunda devoción religiosa. Su madre, Antonia Acutis, relata que a los siete años comenzó a asistir a misa diariamente, una práctica que inspiró a su propia madre a regresar a la Iglesia.
Más allá de su fe, Carlo era un prodigio de la informática. Utilizaba sus habilidades digitales para compartir su fe y crear un sitio web dedicado a archivar milagros. A pesar de su pasión por la tecnología, Carlo también disfrutaba de actividades como el fútbol y los videojuegos, mostrando una mezcla de intereses modernos y tradicionales.
La vida de Carlo Acutis estuvo marcada por su deseo de ayudar a los menos afortunados. Donaba a los sin techo y buscaba maneras de servir a su comunidad. Su devoción y su trabajo en línea llevaron a muchos a considerarlo un "influencer de Dios". Después de su muerte a los 15 años por leucemia en 2006, su madre recibió noticias de milagros atribuidos a él, incluyendo curaciones de infertilidad y cáncer.
El primer milagro reconocido por el Vaticano ocurrió en 2020, cuando Carlo fue beatificado tras atribuírsele la curación de un niño brasileño con una malformación de páncreas. Este milagro fue aceptado después de que el niño, tras tocar una camisa de Carlo, sanara inexplicablemente.
El segundo milagro, que allanó el camino para su canonización, involucró a una estudiante universitaria costarricense que sufrió un grave traumatismo craneoencefálico tras caerse de su bicicleta en Florencia. La madre de la joven viajó a Asís para rezar ante la tumba de Carlo, pidiendo su intervención. Poco después, la joven comenzó a mostrar signos de recuperación, y una tomografía reveló que la hemorragia cerebral había desaparecido.
Kathleen Sprows Cummings, profesora de historia en la Universidad de Notre Dame, destaca que la canonización de Carlo Acutis puede ayudar a la Iglesia a conectar con los jóvenes. "Carlo utilizó internet y sus conocimientos informáticos para difundir su fe, ofreciendo a la Iglesia la oportunidad de mostrar un lado más positivo de las redes sociales", señaló. Canonizar a Carlo no solo resalta la santidad en la era digital, sino que también puede atraer a los jóvenes católicos de nuevo a la Iglesia.
El papa Francisco ha anunciado que convocará una reunión de cardenales para considerar formalmente la canonización de Carlo. Aunque aún no se ha fijado una fecha para la ceremonia, el camino de Carlo hacia la santidad es un hito significativo para la Iglesia Católica.
En un mundo donde las redes sociales y la tecnología a menudo se ven como distracciones o incluso peligros, Carlo Acutis se erige como un faro de esperanza, mostrando cómo estos mismos medios pueden ser utilizados para el bien y la fe. Su vida y obra continúan inspirando a millones, ofreciendo un ejemplo de devoción y servicio en la era digital.
